Parapentismo extremo
Es un deporte de ciudad que
apenas comienza su desarrollo, pues su práctica apenas
empieza a ser conocida por las personas. El parapentismo
extremo se basa en lanzarse con un parapente desde
edificios de gran altura, corriendo el riesgo de caer en redes
de energía o lugares con una gran congestión vehicular,
por ello su nombre extremo.
Desde Dédalo, el hombre siempre sintió la necesidad de
volar, de transgredir las leyes naturales. Esa búsqueda lo
llevó a inventar el avión, el paracaídas, el parapente…
Un poco de Historia A finales de los años 70 unos
intrépidos paracaidistas franceses decidieron intentar los
primeros vuelos en paracaídas desde Los Alpes, este sería
el principio del deporte del Parapente. La definición técnica
sería algo así: planeador ligero y flexible. Planeador porque
no consta de motor y flexible porque no hay partes rígidas
que compongan el ala
Dinámica del ascenso La ciencia del vuelo a vela se basa
en las corrientes térmicas y en las corrientes dinámicas. Las
primeras se producen al calentarse una masa de aire por
conducción, es decir, por el contacto del aire sobre un
suelo
calentado por los rayos solares. Dicha masa de aire se
dilata al elevar su temperatura y resulta más ligera que el
aire circundante, por lo que una vez superada la resistencia
creada por la misma viscosidad, comienza a elevarse en
forma de burbujas o como corrientes verticales más o
menos
cíclicas. Las segundas: la dirección ascendente del viento
al salvar algún obstáculo, técnica reservada casi siempre a
algunas aves de costa y al parapente.
Hoy el parapentismo busca una nueva expresión y
comienza a esbozarse como un deporte de ciudad que
apenas comienza su desarrollo porque su práctica recién se
está extendiendo. Se basa en lanzarse desde edificios de
gran altura , corriendo el riesgo de caer en redes de energía
o lugares con una gran congestión vehicular, por eso lo de
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